Siete de cada diez emergencias con las mascotas ocurren por intoxicación con sapos, enjuagar la boca, ojos, nariz con mucho cuidado de que la mascota no ingiera agua y
correr al veterinario es lo más recomendable. Dar leche u otro líquido no funciona y puede agravar la situación si la mascota está
inconsciente.
En una clínica veterinaria de Naranjo, Alajuela, los médicos no salen del
asombro, un mismo perro ha llegado en un mes no una o dos veces, sino ocho, intoxicado por
el veneno de un sapo, y en todos los casos por la misma razón.
Afortunadamente, es una mascota resistente y aunque en dos ocasiones ha estado al borde la
muerte, lo han podido salvar y ahora es el dueño quien ha tomado las previsiones para que esto
no se repita.
Los médicos veterinarios advierten sobre el peligro que implica la proliferación de sapos
durante el invierno, principalmente para los perros, aunque también pueda ocurrir con gatos.
Los charcos, y la abundancia de zancudos componen su hábitat y con las lluvias se encuentran
en todas partes: lotes baldíos, parques y hasta patios de las casas.
“Para esta época, de cada diez emergencias con perros que atendemos, siete se deben a
intoxicación con el veneno del sapo. El perro se aproxima al sapo para jugar o cazarlo y este al
defenderse produce el veneno”, explicó el Dr. Josué Arias, veterinario del Centro de
Investigación Dr. Pet, miembro de la red de MediSmart.
Lo primero que el dueño debe hacer es enjuagar muy bien la boca, la nariz, los ojos y hasta las
patitas, secarlo muy bien, ya que la temperatura baja y puede afectar aún más por el estado
que se encuentra y luego llevarlo al veterinario. Dependiendo de la resistencia de la mascota y
de la cantidad de veneno a que estuvo expuesta, así serán los síntomas. Pueden ir desde
descoordinación al caminar, pupilas dilatadas, salivación exagerada y temblores hasta la
pérdida de la conciencia y parálisis cardiorrespiratorio.
Pero como lo explica el médico veterinario, aunque el dueño vea que los síntomas son leves,
siempre es bueno buscar la atención del especialista, ya que puede ocurrir que en un principio
no se vea un caso tan grave, pero con el pasar de las horas, el veneno se siga absorbiendo y la
situación se compliqué.
“También es erróneo darle leche, limón, sardina u otros productos, estos no van a evitar la
absorción del veneno, en algunos casos puede potenciar el tóxico y más bien si se los dan a la
mascota cuando ya ha perdido la consciencia, pueden provocar que se dé la broncoaspiración,
es decir, que los líquidos se le vayan por mal camino, a los pulmones y se ahogue”, aseguró
Arias.
Agregó que el único producto que podría servir en cualquier tipo de intoxicación es el carbón
activado, pero el de uso médico que se venden en farmacias o principalmente en veterinarias,
es en sobre para diluir o pastillas, utilizar el carbón para cocinar, puede ser contraproducente,
pues los aditivos que contiene pueden provocar potenciar el tóxico, irritación, u otra
intoxicación, e igualmente, para administrarlo debe estar seguro de que la mascota está
consciente y con capacidad de ingerirlo.
Los médicos veterinarios insisten en que no se trata de eliminar los sapos, pues estos son
necesarios para el ambiente, pero si cuidar que las mascotas no tengan contacto con ellos.
Si va a con su mascota a pasear es mejor que lo haga de día, ya que, los sapos salen de noche y
además, usted tiene más visibilidad para revisar y asegurar el sitio. En su casa, procure tener a
su mascota en un lugar cerrado y en el patio eliminé charcos, así como mosquitos y zancudos.
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