Siete curiosidades del vidrio que quizá no conocías
Existe un extraordinario material que está presente en nuestra vida desde
hace miles de años, es tan común que pasa desapercibido, ya que vemos a través de él, y no nos
detenemos a pensar que se trata de un material de una altísima tecnología con un sin número de
propiedades.
Este material es el vidrio. Un material tan común pero tan complejo, que ha moldeado nuestro mundo y
lo ha hecho diferente en todas las esferas de la vida diaria.
¿Sabías que el uso de envases de vidrio se remonta al antiguo Egipto? ¿Y que su composición es distinta a
la del cristal? ¿Sabes lo que significa que el vidrio es un material inerte? En este texto repasaremos
brevemente las bondades del vidrio, algunos datos sobre su origen y, los beneficios de reciclar los envases
de vidrio.
1. ¿Origen de la palabra vidrio? El término «vidrio» data de la época de los romanos. Ya que el
vidrio posee una tonalidad natural de color verde. El nombre pronunciado en latín en la época
para este material era Viride o Viridus, el cual traducido al español literalmente significa Verde,
y este término finalmente se desarrolló en nuestro lenguaje actual en la palabra, Vidrio.
2. Versatilidad: las ventajas del vidrio han permitido que sea un material presente en
prácticamente, todos los ámbitos de la vida y se ha utilizado con diferentes fines. Los lentes de
vidrio óptico, por ejemplo, son la base de los telescopios y de los avances en la astronomía,
también un elemento clave para el desarrollo de la navegación. Estos mismos lentes han
permitido hacer grandes descubrimientos microbiológicos mediante los microscopios. También
ha estado presente en la tecnología láser, energía solar, telecomunicaciones y la biomedicina.
Asimismo, el vidrio ha tenido influencia en el arte y por supuesto que en la arquitectura. Pero
uno de los usos más extendidos y conocidos del vidrio es su utilización como envase. Botellas o
frascos de vidrio, que permiten desde hace miles de años la perfecta conservación de bebidas
y alimentos.
3. Infinitas vidas: El vidrio se produce a partir de elementos 100% naturales, sostenibles y
abundantes en la corteza terrestre (arena sílica, carbonato de sodio y piedra caliza), así como
una proporción de residuos de vidrio posconsumo llamado “cullet”. Estos materiales, por sus
características hacen del vidrio el único material para consumo masivo capaz de reciclarse
infinitas veces sin perder sus propiedades.
4. Egipto: el vidrio es un material cuyo uso ha sido asociado desde hace miles de años al desarrollo
del ser humano. Los restos de vidrio más antiguos datan de unos 5.000 años a.C. y se han hallado
en zonas de Asia Menor, Mesopotamia, así como en el Antiguo Egipto. Las primeras piezas
hechas íntegramente de vidrio datan del 2100 a.C., en las que se empleaba la técnica del
moldeado. Y fueron los egipcios los que lo utilizaron hace 3,500 años como envase para
contener aceites, bálsamos y perfumes.
5. Cuidado ambiental: Una de las más importantes propiedades del vidrio es que se trata de un
material inerte que no contamina, ni su contenido, ni a la naturaleza, si este llega al medio
ambiente. Esto, junto a su extraordinaria reciclabilidad, convierten al vidrio en el material de
empaque más amigable con el ambiente. Cada vez que reciclamos un envase de vidrio damos vida
a otro exactamente igual, consiguiendo con esto:
a. Importante ahorro de energía
b. Se evitan emisiones de CO₂
c. Se reduce la utilización de materias primas y,
d. Se disminuye ostensiblemente la producción de desechos.
6. Las cosas no son lo que parecen: aunque el material de los envases de vidrio puede parecerse
a los objetos de cristal, este no tiene la misma composición y – por tanto- no se reciclan igual.
7. Inerte: Una de las características más importantes del vidrio es que se trata de un material que
no reacciona químicamente, esto quiere decir que no contamina con químicos los alimentos o
bebidas que contiene. El vidrio conserva, además, en su forma más pura el color, olor, y sabor
de los productos y prolonga el tiempo de vida de los mismos. Es, pues el material ideal para
contener alimentos, bebidas, medicamentos y perfumes, es decir aquellos productos que sé
preocupan por sus propiedades y por la salud del consumidor.
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